Presentamos algunos consejos para hacer un sondeo de opinión con un buen cuestionario.
En general, las preguntas estadísticas (las más comprometedoras para sondear que servirán para la clasificación del encuestado por nivel socioeconómico) deben ser formuladas al final del cuestionario, pero puede ser necesario emplear algunas preguntas iniciales de filtro, para saber si corresponde hacerle el sondeo a ese encuestado, y para usar correctamente los saltos en el cuestionario.
Las preguntas de todo sondeo serio de opinión deben ser claras y no ambiguas ni vagas.
Cuando no hay escalas, se recomienda pedir al entrevistado que elija una sola opción.
Las categorías "no sabe" y "no contesta" deben ser incluídas lo menos que sea posible para garantizar la eficacia del sondeo.
Las listas de respuestas múltiples deben ser cortas, exhaustivas y manejables para el encuestador y para quien responde.
Se recomienda sondear las opiniones rotando la lectura de las opciones de respuesta múltiple, pues se sabe que la gente tiende a elegir lo que más recuerda, que es lo último que se le nombró.
Finalmente, el éxito de buen sondeo de opinión depende de un cuestionario que pregunte lo justo, con un buen ordenamiento por temas y con preguntas que van de lo más general a lo más específico.
A esto debe sumarse una buena eleccion de los respondentes, lo que depende del diseño de la muestra estatística del sondeo.
Encuestas de opinión o sondeos de opinión
Existe una ambigüedad sobre si hemos de hablar de encuestas de opinión o de sondeos de opinión indistintamente.
Esto es, si ambas expresiones son sinónimas y designan lo mismo respecto de las investigaciones que conocemos como "encuesta".
Pero en realidad no lo son, pues si bien lo que define a un sondeo de opinión es correcto cuando se predica de una encuesta de opinión, la conversa no se cumple.
Un sondeo es una investigación mediante encuestas, pero de carácter social. En cambio, una encuesta por muestreo puede hacerse para obtener información sobre el comportamiento de las estrellas o las características de libros en una biblioteca.
O sea, hay encuestas que no son de opinión, en tanto que no hay sondeos de investigación que no sean encuestas, pues se acuerda en llamar sondeos a los estudios cuantitativos mediante encuestas.
Aunque también es posible hacer un sondeo cualitativo.
Por otra parte, "encuesta" se denomina a la técnica de obtención de datos, pero también al resultado de completar un cuestionario.
Cuestiones a tener en cuenta para no confundir los significados y saber bien de qué se habla.
Esto es, si ambas expresiones son sinónimas y designan lo mismo respecto de las investigaciones que conocemos como "encuesta".
Pero en realidad no lo son, pues si bien lo que define a un sondeo de opinión es correcto cuando se predica de una encuesta de opinión, la conversa no se cumple.
Un sondeo es una investigación mediante encuestas, pero de carácter social. En cambio, una encuesta por muestreo puede hacerse para obtener información sobre el comportamiento de las estrellas o las características de libros en una biblioteca.
O sea, hay encuestas que no son de opinión, en tanto que no hay sondeos de investigación que no sean encuestas, pues se acuerda en llamar sondeos a los estudios cuantitativos mediante encuestas.
Aunque también es posible hacer un sondeo cualitativo.
Por otra parte, "encuesta" se denomina a la técnica de obtención de datos, pero también al resultado de completar un cuestionario.
Cuestiones a tener en cuenta para no confundir los significados y saber bien de qué se habla.
Encuestas pagas ¿ganar dinero?
Encuestas pagas ¿ se puede ganar dinero con ellas?
Muchas páginas web promocionan afiliaciones para realizar encuestas de opinión pagas con la promesa de una retribución en dinero, la mayor parte de las veces unos dólares, para quien responda esas encuestas.
Sin embargo, mucha gente cree que anotándose en muchas empresas de encuestas pagas o remuneradas podrá ganar mucho dinero, lo que no está garantizado.
Ocurre que las encuestas de opinión, remuneradas o no, son una forma de investigación, ya sea sobre algún producto -autos, computadoras, comestibles- o servicio -uso de internet, aerolíneas, viajes- y quien encarga un trabajo de esta naturaleza desea conocer más acerca de sus clientes o usuarios, actuales o potenciales.
Ahora bien, la persona que busca una remuneración por responder una encuesta, tal vez por necesidad de ganar dinero, supone que le enviarán encuestas sobre todo tipo de temas con frecuencia, lo que no suele ser así.
El cliente de las encuestadoras invierte su dinero, y paga para tener buena información. Pero a él, por ejemplo si fabrica autos, sólo le interesa la opinión de quienes pueden comprar su marca y tipo de auto, y no la de cualquiera que tenga disposición a responder una encuesta.
Por ello, las encuestadoras seleccionarán a las personas específicas de acuerdo con el perfil de la encuesta, lo que reduce el margen de posibilidades de ser seleccionado para responder una encuesta a cambio de dinero para cualquier persona.
Esto se comprende, como señalamos, considerando que quien encarga la encuesta desea aprovechar su dinero invertido, y que las encuestas de opinión son medios de investigación para ciertos objetivos, por ejemplo comerciales.
En algunos casos, se puede contar con un poco de suerte y responder encuestas por la que se pague muy bien, pero la asiduidad en modo alguno está garantizada.
Muchas páginas web promocionan afiliaciones para realizar encuestas de opinión pagas con la promesa de una retribución en dinero, la mayor parte de las veces unos dólares, para quien responda esas encuestas.
Sin embargo, mucha gente cree que anotándose en muchas empresas de encuestas pagas o remuneradas podrá ganar mucho dinero, lo que no está garantizado.
Ocurre que las encuestas de opinión, remuneradas o no, son una forma de investigación, ya sea sobre algún producto -autos, computadoras, comestibles- o servicio -uso de internet, aerolíneas, viajes- y quien encarga un trabajo de esta naturaleza desea conocer más acerca de sus clientes o usuarios, actuales o potenciales.
Ahora bien, la persona que busca una remuneración por responder una encuesta, tal vez por necesidad de ganar dinero, supone que le enviarán encuestas sobre todo tipo de temas con frecuencia, lo que no suele ser así.
El cliente de las encuestadoras invierte su dinero, y paga para tener buena información. Pero a él, por ejemplo si fabrica autos, sólo le interesa la opinión de quienes pueden comprar su marca y tipo de auto, y no la de cualquiera que tenga disposición a responder una encuesta.
Por ello, las encuestadoras seleccionarán a las personas específicas de acuerdo con el perfil de la encuesta, lo que reduce el margen de posibilidades de ser seleccionado para responder una encuesta a cambio de dinero para cualquier persona.
Esto se comprende, como señalamos, considerando que quien encarga la encuesta desea aprovechar su dinero invertido, y que las encuestas de opinión son medios de investigación para ciertos objetivos, por ejemplo comerciales.
En algunos casos, se puede contar con un poco de suerte y responder encuestas por la que se pague muy bien, pero la asiduidad en modo alguno está garantizada.
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